Todos recordamos esas bodas pomposas, con muchos adornos, gran exhibición de ropa elegante y joyas, menús hiper cargados, con una cantidad exorbitante de platos, orquestas, valses y detalles de boda en plata... Sin embargo, hoy en día los novios se deciden cada vez más por bodas simples, y se extienden cada vez más bodas y caterings de banquetes de estilo campestre, rural o también llamadas "bodas en la naturaleza". La primavera es especialmente adecuada para este tipo de bodas, ya que se puede disfrutar del clima soleado para pasar al aire libre todo el día más feliz de la vida de los novios.
Bodas rurales, una alternativa
A la hora de planear una boda en el campo, acertar con el lugar de celebración garantizará gran parte del éxito del acontecimiento. Este lugar puede ser una granja, una masía o incluso un parque, pero siempre que tenga algo singular. También puedes optar por la contratación de un servicio de comida (catering) que, en lugar del habitual buffet, prepare una original barbacoa.
El hecho de que no sea una boda de gala no implica que debamos olvidar todos arreglos florales o la elección de muebles y detalles bonitos. Por el contrario, la organización de este tipo de bodas requiere mucha atención de los detalles. Todo debe dar sensación de sencillez y naturalidad pero sin que parezca descuidado. Así, en vez de elegir lirios y azucenas elegiremos margaritas, flores silvestres o girasoles. En las mesas emplearemos manteles de lino y ramos de flores como como centros de mesa.
El atuendo de los novios también debe estar adaptado al estilo de la boda. Es importante decidir y elegir un código de vestir común y avisar los invitados (algo que en países como Inglaterra ya hacen desde hace mucho tiempo), orientando a los huéspedes a un color o un tipo de traje concreto. Así, tanto las damas de honor como los novios y, en general, todos los invitados deberán estar conjuntados con el entorno rural, algo que contribuirá a que el ambiente de la fiesta sea más distendido y especial.
Los alimentos naturales son los preferidos en las bodas rurales
El catering de una boda en el campo puede ser rústico, pero también muy como chic: el nivel de sofisticación y la imaginación depende de lo que más os guste. Se puede elegir, por ejemplo, un lugar bucólico, arreglando un escenario con mesas y decoraciones florales clásicas; o, para los más alternativos hacer un verdadero picnic completo de manta y cestas de mimbre en dónde estaría la comida de los invitados. Son ya varias las empresas que ofrecen este tipo de servicio de catering, y ya hay wedding planners que se dedican a proyectos, caterings y decoraciones de estilo rural. Las bodas campestres se han extendido especialmente entre parejas de alto poder adquisitivo, que desean hacer del día de su boda un evento especial y original.
Foto: Aquarela