A la hora de elegir un catering debes tener en cuenta el tipo de evento que vas a organizar y para qué lo necesitas, ya que aunque últimamente se estila hacerlo con un cóctel o un buffet, en muchas ocasiones la mejor opción es hacerlo con una cena de gala. Veamos sus características para saber cuándo organizar una cena de gala:
- Son ideales tanto para grupos pequeños como grandes
- Es la elección perfecta para aniversarios de empresa, final de un congreso, reuniones de ventas o grupos de incentivos
- Antes de cenar suele servirse un pequeño cóctel como aperitivo, que será sencillo o más elaborado dependiendo de la elección del propio cliente
- La cena se servirá siempre en la mesa, ya sea a la francesa (los camareros sirven a los invitados) o a plato puesto, donde la comida está ya en el centro de la mesa y cada invitado se sirve lo que desea comer
- Los menús suelen ser del mismo precio que si se hace tipo buffet y lo ideal es hacerlo como mucho de tres platos, siendo en total entrantes, carne y/o pescado, postre, vino, café y licor
- Al final de la cena suele ofrecerse siempre un buffet de dulces y barra libre de bebidas para que los invitados puedan prolongar su participación y estar con reservas de comida y bebida en todo momento
- La decoración en una cena de gala es imprescindible, debiendo ser especial para cada evento. El precio varía dependiendo del número de invitados y del menú escogido. Además, puedes elegir entre una amplia gama de mantelerías, vajillas, cristalerías o adornos que quieras poner en cada una de las mesas o en el espacio total para darle un ambiente más acogedor al lugar
Foto: La Lloca