De hecho, aunque no existan pruebas científicas al respecto, el binomio comida/eros ha sido utilizado desde tiempos inmemorables para este fin. Y es claramente irrefutable que el acto de comer conlleva tras de sí una gran dosis de vinculación con el erotismo.
Para conseguir que prenda la pasión desde la mesa deben seleccionarse alimentos afrodisiacos, capaces de involucrar a todos los sentidos de nuestro cuerpo en una misión repleta de amor y sensualidad. Si os gusta cocinar podéis inspiraros en la preparación de estos suculentos platos, aunque de lo contrario también podéis recurrir a la contratación de un chef a domicilio. Gracias a este servicio dispondréis de una deliciosa y romántica cena evitando el estrés que genera el hecho de elaborarla y sin malgastar tiempo en fregar vasos y platos.
- Crustáceos
Se encuentran entre los alimentos con más alto poder afrodisiaco. Seguramente las langostas, las gambas o las ostras no resultan opciones del todo económicas para el bolsillo, pero sin duda alguna constituyen platos eficaces para potenciar el erotismo. De hecho, las ostras contienen una gran cantidad de dopamina, un neurotransmisor ligado a las sensaciones de placer que satisfacen estímulos como el hambre, la sed o los impulsos eróticos. En su interior también puede encontrarse zinc, que constituye un mineral muy eficaz en la generación de testosteronas, hormonas responsables del deseo sexual tanto en el hombre como en la mujer.
- Salmón
Cuando el organismo está falto de energía, una de las principales cosas que suelen verse afectadas es la predisposición al sexo. Sin la recarga suficiente de energía nadie está preparado para asumir según qué tipo de esfuerzos y en estos casos la principal vitamina que suele necesitarse es la B3. Este nutriente es importante no sólo para aumentar los niveles energéticos, sino también para favorecer la elasticidad de los vasos sanguíneos. Alimentos como el salmón, los cacahuetes, el atún o el pollo son ricos en la presencia de este tipo de vitaminas. Además, el salmón constituye un excelente potenciador del sexo, gracias a su alto contenido en Omega 3 y a su capacidad para aumentar los niveles de dopamina en sangre e incrementar el deseo sexual.
- Fruta, verdura y especias
El chili, los higos, las almendras, los aguacates, los plátanos, los espárragos, las granadas y el azafrán son ingredientes que no pueden faltar en una cena repleta de pasión. En realidad, cualquier tipo de fruta o de verdura es ideal para promover la salud sexual, puesto que las vitaminas y los minerales que contienen son muy necesarios para producir las hormonas responsables de la excitación y del placer.
- Miel
Una de las mayores y antiguas tradiciones europeas en relación al matrimonio y a los primeros meses de convivencia es la de beber hidromiel para mejorar la energía sexual de la pareja. Lo cierto es que la miel, además de su carácter dulce, contiene un elemento químico llamado boro, que ayuda a aumentar los niveles de estrógeno del organismo. Los estudios científicos certifican que esta hormona constituye uno de los principales componentes sexuales de la mujer, además de ratificar que el boro también aumenta la presencia de testosterona en la sangre.
- Chocolate
Existen un sinfín de libros, de películas y de recetas que inciden en las excelentes propiedades afrodisiacas que presenta el chocolate. Este alimento, habitualmente relacionado con el proceso de enamoramiento y con la sensualidad, incluye en su composición un elemento bautizado como teobromina. Su acción influye a modo de estimulante sobre el sistema nervioso central, aumentando la energía, la rapidez de reflejos, la concentración y el deseo sexual, todas ellas cualidades necesarias para gozar de buen humor. Estudios científicos recientes han encontrado en el chocolate pequeñas dosis de feniletilamina, una molécula que se produce de forma natural durante la etapa del enamoramiento. Su actividad tendría como principales efectos la producción de dopamina.
- Vino
El vino hace buena sangre y además es excelente para favorecer las relaciones sexuales, sobre todo en el caso de las mujeres. Esta afirmación está ratificada por un estudio realizado por la Universidad de Florencia, publicado en la prestigiosa revista científica Journal of Sexual Medicine. Los investigadores florentinos sostienen que los niveles de deseo sexual son más altos en las mujeres moderadas bebedoras de vino tinto, respecto a aquellas que prefieren otro tipo de bebidas alcohólicas o que son abstemias. Los componentes químicos naturales encontrados en el vino tinto mejoran el funcionamiento sexual, aumentando el flujo sanguíneo en las áreas clave del cuerpo femenino.