La importancia de los abuelos en el seno familiar es incuestionable. Y no lo decimos solo por la encomiable labor que realizan diariamente con los nietos mientras los padres trabajan. Las enseñanzas, valores, cuidados y experiencias que un abuelo transmite a sus nietos constituyen un preciado tesoro que forjará gran parte de su vida durante la edad adulta.
Por ello, la mayoría de los países de habla hispana celebra el Día de los Abuelos el próximo 26 de julio. Esta fecha, que coincide con la onomástica de santa Ana y san Joaquín, según la tradición católica, aspira a convertirse en un día que sirva para recordar la importancia de los abuelos en el núcleo de la familia.
Precisamente por ello, hay que celebrarlo como se merecen: organizando una fiesta especial en la que estén rodeados de sus seres más queridos: su familia.
Se merecen eso y mucho más
Lo primero que tenemos que hacer es buscar un lugar especial para ellos. Queremos transmitirles lo importantes que son para nosotros, demostrarles el profundo cariño que sentimos por ellos. Y aunque de uno u otro modo se lo hacemos ver todos los días, deseamos que ese momento sea mágico.
Para darle a nuestra fiesta ese toque singular que se merece, podemos decorar el lugar elegido con fotos de los nietos o con dibujos que hayan hecho en los que aparezcan los abuelos, e incluso manualidades especialmente creadas para este día. Detalles que hagan que se sientan los verdaderos protagonistas de la fiesta.
Asimismo, podemos buscar música de su época y ponerla mientras dure la celebración. También podemos preparar una canción con los más pequeños, o ensayar una poesía o una pequeña actuación donde también participen los más mayores. Podemos tratar de representar alguna escena de algún libro que les guste, o sencillamente idear una pequeña obra que recoja el amor que profesamos por nuestros mayores y la importancia de tenerlos con nosotros todos los días.
Y para comer...
Si el espacio que hemos elegido para la celebración está al aire libre, podemos organizar una cena familiar y disfrutar de una espléndida noche de verano. Una barbacoa o canapés pueden ser una opción muy interesante. Si queremos celebrar una comida, podemos elaborar una gran paella. Como postre, alguna especialidad que les guste mucho y en cuya preparación hayan participado todos los nietos. Nuestro particular regalo para darles las gracias por ser como son.
Si no queremos cocinar, siempre podemos recurrir a los servicios especializados del chef en casa, o contratar una paella o un servicio de catering para ese día. Lo importante es que, entre todos, les demostremos que son los protagonistas ese día.
Como colofón, podemos preparar un discurso que sirva para que los nietos les agradezcan todo lo que hacen por ellos. Seguro que, además de alguna que otra lagrimita, arrancarán muchas sonrisas.