Comer sano no cura enfermedades, pero sí puede prevenir o reducir el riesgo de padecerlas. Seguir una alimentación saludable y realizar ejercicio de manera habitual mejora nuestra calidad de vida y contribuye a disfrutar de buena salud.
Tenemos la suerte de poder deleitarnos con multitud de alimentos que podemos incorporar a nuestra dieta para hacerla variada y saludable. Por supuesto, las frutas y las verduras son imprescindibles, ya que son fuente de vitaminas, minerales y de fibra. Pero hay otros alimentos que pasan más desapercibidos y que debemos incorporar para complementar nuestra nutrición. ¿Quieres saber qué alimentos son beneficiosos también para nuestra salud? Aquí tienes los que debemos incluir en nuestra dieta.
Frutos secos
A menudo se asocia el consumo de frutos secos al aumento de peso. Y es que estos alimentos tienen muchas calorías. Pero un consumo moderado contribuye a mejorar nuestra salud. La razón es que los frutos secos son alimentos muy ricos en ácidos grasos saludables para nuestro organismo, como el ácido oleico y el omega 3, esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. Además, son fuente de fibra, contienen proteínas de origen vegetal, vitaminas B y E y minerales como el fósforo, el potasio y el hierro.
Frutos rojos
Como los frutos secos, los frutos rojos o frutas del bosque pasan casi de puntillas por nuestra dieta, y no debería ser así. Los frutos rojos tienen propiedades desestresantes y antioxidantes, esto último debido a las altas cantidades de flavonoides que contienen. Por eso, son un alimento imprescindible para evitar la hipertensión arterial y reducir el colesterol. Los flavonoides también favorecen una buena salud cardiovascular y ayudan a prevenir el envejecimiento celular y el cáncer. También son ricos en antocianos, un compuesto que, además de ser el responsable de que presenten ese color vivo y rojizo, es beneficioso para minimizar la aparición de enfermedades como el alzhéimer.
Legumbres
La FAO, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, dice de este alimento que ayudan «a combatir la desnutrición en países desarrollados o en desarrollo». Las legumbres no deben faltar en una dieta equilibrada, pues son ricas en fibra, carbohidratos, micronutrientes, vitamina B, hierro y proteínas vegetales. Su consumo de manera habitual reduce el colesterol y favorece el funcionamiento cardiovascular. Además, el hierro presente en ellas aporta energía para disminuir el cansancio y la fatiga. Por si todo ello no fuera suficiente, lejos de lo que se cree, ayudan a controlar el peso y, por tanto, a mantener la obesidad a raya.
Pescado
Otro organismo, la Fundación Española del Corazón, llama la atención sobre la importancia de este alimento en nuestra dieta. Y no es para menos: el pescado contiene proteínas animales, vitaminas (B y D), minerales (potasio, yodo, calcio, hierro) y ácidos grasos esenciales (omega 3), sumamente beneficiosos para la salud del corazón. Investigadores del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Valencia apuntan, además, que su ingesta ayuda a prevenir la diabetes. Por tanto, debemos incluir el pescado en nuestra cesta de la compra para poder disfrutar de los beneficios que conlleva su consumo de manera habitual.
¿A qué esperas para incluir estos alimentos en tu próximo evento?