A menudo la cocina sin grasa está asociada a la pérdida de peso o a dietas recetadas por el médico para controlar o superar algunas enfermedades. Ello hace que se considere una comisa sosa y sin sabor.
Todo lo contrario: cocinar sin grasa es algo más que hacer a la plancha un pescado y acompañarlo con verduras cocidas. Es apostar por un estilo de vida saludable que no tiene por qué estar reñido con el sabor o la variedad de alimentos. Se trata de saber cómo cocinar los alimentos y de saber qué alimentos son ideales para según qué método.
Por supuesto, cocinar sin grasa pasa, inevitablemente, por reducir el consumo de grasas, entre ellas, el aceite. Y eso lleva sin remedio a abandonar métodos de cocinado como la fritura, cuyo abuso de aceite y la forma en la que se preparan los alimentos lo hacen incompatible con una cocina sin grasa.
¿Cómo cocinar los alimentos?
Qué duda cabe de que cocinar a la plancha es un método eficaz para reducir las grasas, pero no es el único. Existen otros modos de cocinar los alimentos que son igual de saludables para una dieta sana y equilibrada. Entre ellos, los más frecuentes son los siguientes:
- Cocinar al vapor: la cocina al vapor es, posiblemente, el método más conocido y empleado para cocinar sin grasa. No solo se pueden cocinar hidratos de carbono, sino que las verduras y las proteínas pueden someterse a este método de cocción que, si se realiza de manera adecuada, permite conservar todos los nutrientes de los alimentos.
- Cocinar al vacío: es un método de cocinado que se está empezando a poner de moda como consecuencia de su empleo en la alta cocina. Se realiza introduciendo los ingredientes en una bolsa de plástico a la que se le saca todo el aire con la ayuda de una máquina de vacío. Después se introduce en una olla o en el horno para proceder a su cocción.
- Hornear: el horno es un electrodoméstico que permite disfrutar de platos sabrosos y saludables que, además, pueden ser bajos en grasas. En la actualidad los hornos multifunción permiten disponer de la opción cocción a vapor con el calor seco que hace posible saborear los platos sin apenas grasas.
Consejos para conseguir platos sabrosos y sanos
Para hacer que nuestros platos sean sabrosos y, a la vez, sanos, podemos seguir estos consejos:
- Sustituir la cocción por el vapor o por el cocinado al vacío. Así se conseguirá que los ingredientes mantengan sus nutrientes y no se alteren los sabores de los platos.
- Adereza tus platos con salsas o jugos caseros bajos en grasa, como salsa de tomate, zumo de limón, etc.
- Reduce el consumo de sal. En su lugar, puedes potenciar el sabor de tus platos con especias.
- Evita el consumo de alimentos fritos o excesivamente condimentados, así como el uso de platos precocinados y de aderezos artificiales.
Con estos sencillos consejos podrás pedir un catering mucho más ligero al reducir las grasas de tu alimentación sin que el sabor de tus platos se vea alterado.