Tu boda está a punto de acabar. Todo ha salido a pedir de boca. Los invitados están ansiosos por comenzar la celebración informal de tan especial evento, lejos ya del protocolo típico de los convites. Es ahora cuando queremos que nuestra barra libre complete un día perfecto; que esas horas que quedan para que termine la celebración pongan la guinda al pastel del que se supone que será el mejor día de nuestra vida.
La barra libre no tiene por qué estar siempre asociado a libertad para bailar hasta altas horas de la noche y beber como si no hubiera un mañana. Ni a todos les gusta el alcohol y las bebidas, ni a todos les apetece solo eso. Por ello, ¿qué mejor que organizar mesas dulces y saladas para amenizar el final de la velada? Os proponemos en este artículo algunas ideas que sin duda harán las delicias de los invitados más exquisitos.
"Soy más de dulce"
Vamos con las sugerencias para los más golosos. Las empresas especializadas en mesas dulces ofrecen una amplia gama de productos para todos los gustos. Muchas de ellas ofrecen cake pops, lo último en dulces para eventos. Podemos elegirlos de las formas y sabores que deseemos (con fideos de colores, rellenos de bizcocho red velvet, en forma de corazón, etc.). Su tamaño es quizá su principal baza ya que aportan ese toque de dulzor justo sin resultar excesivamente empalagoso.
Para los que son golosos con todas las de la ley, una brillante idea es contar con una mesa dulce compuesta por tartas y pastelitos de distintos sabores y tamaños: coco, chocolate, fruta… Las opciones son infinitas. Incluso podemos incluir recipientes con galletas y macarons variados para que nuestros invitados puedan servirse aquellos que deseen.
Si queremos causar furor, sobre todo en los niños, podemos incorporar a nuestra mesa un s'mores bar. Especialmente dedicados para los amantes de las nubes de golosina, y para los que no lo son tanto. Por medio de pequeños encendedores o mecheros, podremos quemar nuestras nubes y sentir cómo se derriten en nuestro paladar.
Por supuesto, no podemos olvidarnos de los tradicionales candy bar, un auténtico buffet de chucherías para aquellos que se sienten jóvenes de espíritu.
¿Que la noche avanza y los primeros rayos del sol nos dan la bienvenida? No hay problema. Podemos incorporar a nuestra mesa dulce churros y chocolate. No hay mejor modo de comenzar una nueva vida que tomando un sabroso desayuno con aquellos que quieres. ¿Y qué son sino los churros con chocolate?
"Soy más de salado"
Las mesas saladas también cuentan con un gran público de seguidores, que prefieren tomar aperitivos salados para acompañar la barra libre y dejar atrás el regusto dulce de la recién terminada tarta nupcial.
Como en el caso de las mesas dulces, cada vez son más las empresas especializadas en banquetes de boda que están incorporando mesas saladas a sus servicios. En ellas no pueden faltar manjares como el que formaría una selección de quesos y mermeladas, acompañados, o no, con tostas y rebanaditas de panes selectos. Sin duda, una excelente idea para tomar junto a algunos licores y destilados.
Un clásico donde los haya: las mesas saladas de bocaditos son una opción que siempre gusta a todos. Embutidos, panes o tostas, y una gran selección de pates pueden completar nuestra mesa.
Pero, como sucediera con el s'mores bar, la barra libre de palomitas causa sensación en las mesas saladas. Palomitas de chocolate, saladas, de mantequilla, picantes, de canela,… ¿A quién no le gustan?