Se dan multitud de consejos sobre cómo organizar una boda, cuáles son las propuestas más novedosas en las invitaciones o los menús o qué pasos deben seguirse para que todo salga perfecto. Pero los invitados también deben colaborar con los novios y conocer y seguir algunas normas básicas no escritas para que todos puedan disfrutar de un día tan especial como realmente se merece.
Cuidado con el traje
Pese a que pueda parecer una cuestión banal y se suponga que todos los invitados saben más o menos cómo deben vestirse para una boda, no está de más recordar algunas reglas imprescindibles:
Para ellas: Evitar los escotes demasiado pronunciados, optar por un traje corto –el largo sólo podrá llevarse en las bodas nocturnas y si lo piden los novios-, no abusar de los brillos o los adornos excesivos –sobre todo en las celebraciones diurnas- y, sobre todo, no llevar nunca un vestido blanco –es el color que se reserva para la novia.
Foto de atodoconfetti.com.
Para ellos: En general será suficiente con llevar un traje de chaqueta con corbata –no es necesario esmoquin, ni mucho menos frac, salvo que se especifique en la invitación, ni pajarita.
Foto de stylemepretty.com.
La asignación de asientos
Normalmente serán los novios los que determinen la colocación de los invitados en las diferentes mesas, por lo que es importante respetarla y sentarse en el lugar asignado. Si se trata de una boda informal en la que simplemente se va a servir un cóctel o hay alguna especie de buffet, no deberá reservarse ningún asiento para que todos los invitados puedan descansar en ellos en algún momento.
Foto de Esther Conde Catering.
Empezar a comer
No es necesario esperar a que los camareros sirvan todas las mesas del salón para empezar a comer, pero sí que deben estar servidos los invitados con los que se comparta mesa. Si en algún momento el servicio se detiene sin que todos los comensales tengan su plato -y éste debe degustarse en caliente-, quienes ya lo tengan podrán empezar, aunque lo correcto será preguntar a quienes aún lo estén esperando si tienen algún inconveniente.
Foto de Home Chef.
El momento del baile
Una vez concluido el banquete y justo después de cortar la tarta llega uno de los momentos más esperados en cualquier boda: el baile. Si bien es cierto que cada vez son más los novios que prescinden del tradicional vals y buscan sorprender a sus invitados con todo tipo de coreografías, se trata de un momento en el que el matrimonio debe ser el único protagonista.
Por ello, deben ser los primeros en lanzarse a la pista y, tras ellos, los padrinos. Y por muy cercanos que sean los familiares y amigos deberán esperar o bien a que termine esa primera canción o a que sean los propios novios los que les animen a unirse.
Foto de Jaleo Eventos.