Un buen servicio de discoteca móvil no deben limitarse únicamente a presentar un disc-jockey que vaya cambiando la música durante el tiempo que sea necesario. En primer lugar, se debe informar a la empresa del tipo de recinto en el que se va a celebrar el evento –sobre todo si es al aire libre- y el número aproximado de asistentes para que pueda adaptar el equipo de sonido y las luces que completan el show.
Por otra parte, hay que especificar las circunstancias y el tipo de celebración que se trata para que el profesional o equipo de profesionales que se contrata pueda elegir, más o menos, el tipo de música que resulta más apropiada –no es lo mismo contratar una discoteca móvil para una boda o una fiesta infantil o de la tercera edad que para una cena de empresa o un encuentro más formal-.
Es importante que, en todos los casos, el cliente y la empresa acuerden previamente tanto las condiciones generales y concretas del servicio como, por supuesto, el precio del mismo –que dependerá, fundamentalmente, del equipo que se requiera para cubrir las necesidades requeridas y del tiempo que se pueda alargar el evento-.
Así, por ejemplo, cabe la posibilidad de disponer de una discoteca móvil básica a partir de entre 60 y 80 euros por una hora, hasta los 150 o 170 euros por un equipo para un evento a partir de 200 personas. Estos precios pueden resultar más económico si el servicio se extiende durante varias horas o se presenta en forma de pack promocional con otro tipo de prestaciones.