La Noche de Brujas es una celebración que conmemoraba, en origen, el final del verano. El sincretismo resultante de la cristianización de esta festividad celta ha hecho que, desde hace unos años, Halloween se celebre en países ajenos a la tradición anglosajona, como España o Sudamérica, por ejemplo.
Tal es así que, de un tiempo a esta parte, se ha convertido en algo habitual disfrazarse para festejar el 31 de octubre en compañía de amigos y familiares. Para que nuestra celebración sea completamente perfecta no basta solo con ataviarse con un traje terrorífico y engalanar nuestra casa para la ocasión. Preparar suculentos platos y deleitar a nuestros invitados con una cena «de miedo» es también una parte sumamente importante para que el resultado sea insuperable.
He aquí 5 ideas para que nuestra comida sea aterradora:
- Preparar unos aperitivos escalofriantes. Hay que dejar volar la imaginación y elaborar platos sencillos, pero con un toque de color para que resulten terroríficos. Podemos cortar taquitos de queso y cubrirlos con mermelada de fresa o bien colocarles unas alitas de murciélago que habremos recortado previamente con cartulina negra. También podemos cocer huevos y mancharlos de salsa de tomate, o bien dibujarles los pliegues de un cerebro. Por último, podemos cortar rebanadas de pan con formas de ataúdes y decorarlas por encima con salsas de colores «sospechosos»: verde, rojo, negro…
- Si optamos por servir carne, una idea muy interesante es formar arañas con la carne de las hamburguesas. Para ello, pondremos dos hamburguesas, de distinto tamaño, sobre un plato. La pequeña será la cabeza de la araña y la de mayor diámetro, el cuerpo. A continuación, le añadiremos ramitas de romero, sin las hojas, para que sean las patas.
- Podemos acompañar la cena con arroz negro, al que le habremos dado forma de ataúd. Por supuesto, no nos podemos olvidar de la tradicional calabaza. Podemos vaciarla y rellenarla de cualquier salsa para mojar o untar, como queso azul o verde, o salsa de tomate picante, por ejemplo.
- La bebida la serviremos en un gran recipiente. Para darle un toque terrorífico, podemos pelar una manzana y trocearla formando ojos o incluso fantasmas, para después anadirlos a nuestra bebida.
- Como postre, podremos preparar cupcakes con relleno de mermelada de frutos rojos, galletas con forma de dedos o pasteles que simulen fantasmas. En las tiendas especializadas encontraremos moldes muy espantosos.
Para darle un toque más aterrador a la velada, no te olvides de ambientar la fiesta con música estremecedora y de mantener la estancia iluminada solo con velas; así le daremos una pincelada más sorprendente a la fiesta.
Recuerda que, si no nos vemos muy duchos o no tenemos tiempo, podemos contratar los servicios de empresas especializadas en el desarrollo de eventos temáticos. Estos profesionales sabrán ofrecernos todo lo necesario para convertir la fiesta en honor a los muertos en uno de los días más destacados del año.