En Estados Unidos y ya en algunos países europeos, han encontrado la solución a esta breve felicidad: celebrar la boda a lo largo de todo un fin de semana. Es lo que se conoce como Wedding Weekend.
El Wedding Weekend es la elección perfecta para aquellos que quieren salirse de lo común y desean celebrar el día más importante de su vida en el campo o en algún pueblito cerca del mar, lejos de la ciudad.
Obviamente, sobra decir que alargar la boda durante todo un fin de semana supone un esfuerzo extra por parte de la pareja o del wedding planer.En este post queremos facilitaros algunos consejos para que la organización de vuestro Wedding Weekend os resulte más fácil:
Es lo primero que hay que decidir y el elemento más importante, por lo que prestadle especial atención. Si queréis disfrutar al máximo del fin de semana, escoged un lugar donde os encontréis cómodos y donde vuestros huéspedes puedan disfrutar de la celebración. Lo ideal es, además, que proporcionéis el alojamiento a los invitados, para que no tengan que ir y volver de sus ciudades.
Algunas ubicaciones ideales para celebraciones de bodas:
- Un castillo antiguo es perfecto para celebrar una boda romántica con un aire atemporal y rodeado de magia. Si encontráis algún castillo que esté acomodado para eventos, será más fácil, puesto que ya se presupone un sitio capaz de acomodar a un gran número de personas
- Algún pueblo de montaña o costa, o una aldea medieval son lugares de ensueño para disfrutar del fin de semana. Al ser una ubicación más amplia, os dará más juego para que realicéis actividades en distintos lugares.
- Casa Rural: Ideal para darle un toque más rústico. Puede ser la ubicación perfecta si queréis pasar el fin de semana en un ambiente bucólico. Muy romántico.
- Hotel: Si lo miráis con antelación, podréis reservar un hotel especialmente para la ocasión. De este modo ya os aseguráis la acomodación de los invitados en las habitaciones del mismo.
Como ya hemos comentado, organizar todo un fin de semana de celebración requiere un esfuerzo organizativo mayor que en una boda tradicional. Es por ello que se puede contemplar la idea de recurrir a un wedding planer o amigos acostumbrados a organizar eventos para facilitar la tarea.
Algunos puntos a tener en cuenta para que no haya imprevistos:
- Transporte: es necesario coordinar los horarios de llegada y salida del transporte con el que vayan a venir los invitados: aviones, trenes…
También sería necesario facilitarles el modo de llegar al lugar: si hay autobuses públicos, coches para compartir… O, incluso, alquilar un transporte privado, como un autobús o varios microbuses, para la ocasión.
- Ubicaciones: Es necesario explicarles a los invitados el itinerario del fin de semana, para que puedan adaptarse al lugar y sepan qué actividad se realizará, cuándo y dónde.
- Hospedaje: Escoger y reservar el lugar donde tus invitados pasarán las noches. Es uno de los puntos más importantes. La elección del hotel, hostal o casa rural no puede ser escogida al azar. Tampoco las habitaciones, pues se deberían reservar de forma contigua, para que vuestros invitados no estén desperdigados por todo el hotel. También hay que tener en cuenta quiénes compartirán pasillo o planta del hotel. Por ejemplo, evitando ubicar a una familia con niños pequeños al lado de la habitación de unos ancianos.
Para evitar explicar invitado por invitado cuál será el itinerario, se pueden imprimir varios programas de fin de semana y dárselo a cada uno a su llegada.
Alguno de los amigos de confianza de los novios puede ocuparse de organizar este punto. Hay que escoger a una persona que sea resolutiva, capaz de manejar cualquier imprevisto que se presente sin alterar a la pareja de enamorados.
- Viernes por la tarde: Llegada y ubicación de los invitados en las habitaciones.
- Viernes por la noche: Cena ligera y cócteles con el futuro novio. Esta primera celebración debería ser sin la novia, pues según la tradición, el novio y la novia no deben verse el día antes de la boda. También se pueden dividir los invitados entre ambos.
- Sábado por la mañana: Mientras las mujeres, seguro, estarán arreglándose para la gran ocasión, los hombres y los niños pueden entretenerse jugando a algún deporte o juego de mesa. O, por qué no, haciendo un poco de turismo.
- Sábado por la tarde: Celebración de la boda. Definitivamente, el momento más importante de todo el fin de semana. Lo bueno de una Wedding weekend es que los invitados viven de lleno toda la emoción de los preparativos y los momentos previos al gran día.
- Sábado por la noche: Es cuando comienza la fiesta. Según el gusto de los novios y su presupuesto, hay mil alternativas para la noche de bodas. Los invitados podrán disfrutar al máximo, ya que no tendrán que conducir para volver a casa. Por ello, la barra libre es una buena opción ya entrada la noche.
- Domingo por la mañana: Un brunch o un aperitivo es la mejor forma de acabar el fin de semana. Todo el mundo ya está más relajado y tienen tiempo de conversar y comentar la celebración que tuvo lugar la noche anterior. Una barbacoa también es una buena alternativa, divertida y que saciará a los invitados que estuvieron hasta tarde festejando el matrimonio. La cocina internacional es una opción que dará distinción al final del fin de semana. Si preferís algo más ligero, comida veraniega, cóctel de frutas o un carrito de helados son siempre buenas ideas.
Ahora, ¡os toca a vosotros dejar ir vuestra fantasía y disfrutar del Wedding Weekend!